Creta: los minoicos no provenían de África.
Son originarios de Europa, desmentida la hipótesis de una llegada desde Egipto o desde el Medio oriente. Analogías con los sardos.
¿Recuerda el legendario rey Minos que, según la tradición, ordenó la construcción de un laberinto en Creta para encerrar la mítica criatura mitad hombre y mitad toro conocida como el Minotauro? Pues bien, la primera civilización avanzada de Europa, justamente la de los minoicos, es originaria del continente Europeo y no proviene de Asia o de África como muchos estudiosos pensaban. El análisis del ADN de antiguos restos humanos en el isla de Creta arroja nueva luz sobre el origen de la civilización minoica, concepto desarrollado por Sir Arthur Evans, el arqueólogo británico que desenterró el palacio de Cnossos en la isla, con cuatro mil años de antigüedad. Fue de hecho él quien sugirió que los minoicos se habían refugiado en Creta proviniendo del delta del Nilo en Egipto, huyendo de la conquista de su región por parte de un rey proveniente del sur del territorio, hace unos cinco mil años.
La Hipótesis- Pero los análisis de ADN indican que los minoicos eran indígenas europeos. Los resultados de la investigación son consignados en la revista Nature Communications- “Evans se sorprendió al encontrar un civilización tan avanzada en la isla de Creta”, explica George Stamatoyannopoulos, uno de los autores, genetista de la Universidad de Washington en Seattle. “Para sostener el origen nordafricano de los minoicos dio como pruebas las aparentes semejanzas entre el arte egipcio y el minoico, además de las similitudes entre las tumbas circulares construidas por los primeros habitantes de Creta meridional y aquellas construidas por los antiguos libios. Pero otros arqueólogos han sostenido que los orígenes de los minoicos estuvieron en Palestina, Siria o en Anatolia”.
El ADN.- Los estudiosos analizaron el ADN de 37 restos de individuos sepultados en una gruta en el altiplano de Lassithi, en la parte este de la isla. Se cree que la mayor parte de estas sepulturas pertenecen al periodo minoico medio, es decir, de hace unos 3700 años. En particular, fue analizado el ADN mitocondrial extraído de los dientes de los esqueletos, localizado en los organelos celulares (las mitocrondrias) y que pasa casi sin variaciones de la madre a los hijos. Las secuencias fueron confrontadas con otras similares de otras 135 poblaciones europeas, de África y de Anatolia, provenientes de muestras antiguas y modernas. La comparación ha excluido una origen nordafricano de los minoicos, ya que los antiguos cretenses mostraron poca semejanza genética con los libios, los egipcios y los sudaneses. Pero son igualmente distantes genéticamente de las poblaciones de la península Arábiga, entre los cuales los sauditas y los yemenitas.
Afinidad con los sardos- El ADN antiguo minioco es, en cambio, mucho más cercano a aquellos de las poblaciones de la Europa occidental y septentrional. Una particular afinidad genética es aquella con las poblaciones de la edad de bronce de Cerdeña y de la Península Ibérica y con las muestras neolíticas provenientes de Escandinavia y de Francia. Además, el ADN minoico se parece también a aquél de las personas que viven hoy sobre el altiplano de Lassithi. Los autores concluyen entonces, que la civilización minoica era fruto de un desarrollo local, originado de habitantes que probablemente habían llegado a la isla hace unos nueve mil años, en el Neolítico. “Los minoicos son europeos”, afirma Stamatoyannopoulos, “y están también ligados a los cretenses actuales. Pero es también evidente que después su civilización ha recibido la influencia cultural de otros pueblos del mediterráneo, incluidos los egipcios.”
Traducción propia a partir de http://www.corriere.it/scienze/13_maggio_29/creta-minoici-non-erano-africani_f72498a0-c7b3-11e2-803a-93f4eea1f9ad.shtml
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